Seguro que has escuchado las palabras superalimentos o superfood ya que son términos que están de moda.
Hoy os vamos a explicar en qué consisten estos alimentos, os vamos a contar cuáles son los alimentos que se consideran “súper” así como sus propiedades y características.
Si quieres aprovecharte de los compuestos nutricionales y los beneficios de estos alimentos tan completos te recomendamos que no te pierdas el contenido de este artículo.
Superalimentos: ¿qué son y cuáles son sus características?
Los superalimentos son muy populares hoy en día ya que se consideran alimentos cuyas propiedades nutricionales son tan completas que los hacen imprescindibles en toda dieta que se precie.
El denominador de común de estos alimentos tan diferentes entre sí es que son de lo más completos nutricionalmente hablando y destacan por sus beneficios para la salud.
Da igual que sea un alimento tan diferente como un salmón, un brócoli, legumbres o frutos secos. Todos ellos comparten una gran riqueza nutricional, versatilidad alimenticia y muy completos desde el punto de vista de vitaminas y aporte energético.
En otras palabras, estos alimentos son imprescindibles en toda dieta que se precie.
Los superalimentos proporcionan un aporte adicional energético y para nuestra salud. Su consumo es muy atractivo para la mayoría de usuarios ya que basta la ingesta de uno de ellos para cubrir varias necesidades diarias de vitaminas y minerales.
Además, son ideales para incluir en cualquier dieta ya que se consideran de lo más saludable. Otro motivo es que muchos de ellos son fáciles de conseguir y no son muy caros.
Por si eso fuera poco, la mayoría de superalimentos suelen mejorar nuestro estado de bienestar, así como un aumento de los niveles de energía por su alto contenido nutricional.
Esto los ha hecho más atractivos para la mayoría de los consumidores.
Contenido y propiedades de los superalimentos
Lo primero que debemos decir es que, aunque los superalimentos están de moda y muchos nutricionistas y expertos los recomiendan (cosa que está muy bien), no debemos encumbrarlos ni darles mucho protagonismo ya que son muy ricos nutricionalmente, pero no hacen milagros.
Además, en muchos casos a algunos superalimentos se le otorgan evidencias científicas sobre sus propiedades cuando no siempre es así.
Por ejemplo, al aceite de coco se le asocian propiedades antifúngicas y antiobióticas, así como un descenso del colesterol si se consume con moderación cuando esto no es del todo cierto.
En cambio, otros alimentos sí que tienen evidencias científicas que ratifican su calificación como “superalimentos”.
Uno de ellos es otro aceite vegetal, nos referimos al aceite de oliva virgen extra o AOVE considerado por la ciencia como el aceite vegetal más saludable y completo del mundo gracias a su alto contenido en grasas saludables.
Que un superalimento no esté avalado “del todo” por la ciencia no significa que no se pueda consumir o incluir como superalimento.
Es recomendable el consumo de la mayoría de estos superalimentos, lo único que debemos saber diferenciarlos y distinguirlos ya que sus propiedades no son iguales.
Lo que queremos decir es que no porque tengan muchas propiedades son del todo necesarios. Una vez hemos remarcado este aspecto vamos a hablar de sus características y propiedades que no son iguales entre sí.
Características y compuestos
Para que un alimento se considere “súper” no es necesario que sea rico en todos los compuestos que vamos a citar a continuación, basta al menos dos o tres de la lista.
Así, para que un alimento se considere súper debe contener gran cantidad de los siguientes compuestos:
- Vitaminas. Cualquiera del grupo B, A o C.
- Antioxidantes.
- Fibra.
- Minerales: calcio, zinc y sodio, por ejemplo.
- Ácidos grasos saludables. Como el omega 3 y omega 6. Si quieres saber cómo escoger los ácidos grasos más saludables consulta el enlace anterior.
A modo resumen, se puede decir que un superalimento tiene grandes beneficiosos para la salud de una persona. Esto se puede deber a que es rico en alguna de los compuestos anteriores.
Pero que tenga vitaminas no implica que tenga fibra. Así, por ejemplo; tenemos las semillas como la chía que destacan por su contenido en antioxidantes y grasas saludables.
En cambio, otros alimentos como las algas y el plancton marino como la espirulina destacan por su facilidad de absorción y propiedades antiinflamatorias gracias a sus oligoelementos y contenido en agua y fibra.
El alto contenido en vitaminas y minerales de los superalimentos puede ayudar a su cuerpo a prevenir enfermedades y mantenerlo más sano.
Propiedades y beneficios de los superalimentos
Cuando se incorporan a una dieta equilibrada, el consumo de los mismos puede favorecer positivamente en nuestra salud.
De entre los aspectos más saludables destacan una mayor protección a órganos tan vitales como el corazón, el cerebro, el hígado o el cerebro.
Su consumo mejora la salud del corazón, la pérdida de peso, previene la aparición de determinadas enfermedades e incluso minimiza la aparición del envejecimiento al combatir sus efectos.
Ejemplos de superalimentos:
A continuación, os vamos a nombrar algunos ejemplos de estos alimentos entre los que se encuentran:
- Té en general, aunque algunas variedades de té rojo o verde como el matcha son superiores al resto.
- Café: los beneficios y propiedades de esta bebida son muy a tener en cuenta. Los nutrientes y antioxidantes del café son proporcionados por antioxidantes como los ácidos hidroxicinámicos y los polifenoles que están muy presentes en el aceite de oliva de calidad superior como el temprano.
- Bayas. Las bayas son una bomba nutricional gracias a su alto contenido en vitamina C, fibra, y flavonoides antiinflamatorios y antioxidantes. Su consumo es ideal para las personas mayores por sus propiedades antiinflamatorios y antioxidantes de sus flavonoides.
- Huevos. Antes se decía que el consumo de más de un huevo al día era malo para el colesterol. Hoy en día se sabe que no es cierto. La OCU recomienda su consumo ya que es fuente de vitaminas y proteínas. Contiene vitaminas A, D, E y K así como minerales como el fósforo, hierro, zinc y selenio.
- Legumbres. Da igual que tomes lentejas o alubias, ambas son de la familia de las leguminosas lo que implica grandes beneficios nutricionales y de proteínas. Por algo, son uno de los alimentos más consumidos en el mundo desde hace miles de años.
- Frutos secos y semillas.
- Productos lácteos como el Kéfir, yogur y el queso. Para que te hagas una idea, un simple vaso de leche de vaca aporta lo siguiente: proteínas 8 gramos, grasa 8 gramos, minerales: un 10 por ciento de potasio, un 13 por ciento de selenio, un 28 por ciento de calcio y un 22 por ciento de fósforo. Además, tiene vitamina D, B12 y riboflavina o B2.
- Aceite de oliva y aceites vegetales superiores ricos en grasas saludables como el Omega 3 y el Omega 6, entre otros.
- Pescados como el salmón, el atún rojo y la trucha.
La lista anterior es una idea general para que sepáis cuáles son los superalimentos más populares, aunque existen muchos más, muchos de ellos exóticos y a veces difíciles de conseguir.
Come podéis comprobar existen muchos de estos superalimentos y aunque no debéis conocerlos todos, al menos sí los más completos desde un punto de vista nutricional.
Os recomendamos el consumo de cualquiera de ellos, siempre que sea con moderación. Por ejemplo, el AOVE es muy bueno, pero si tomas mucho al día puede hacer que tengas sobrepeso.
Con esta lista esperamos que os animéis a consumirlos e incluirlos en vuestras dietas.
Como siempre os invitamos a compartir este artículo y seguir visitando nuestro blog gastronómico donde os informamos de las noticias y artículos más saludables e interesantes del sector.